(Crítica) Sarah Morgan - Un griego poderoso

Sarah Morgan - Un griego poderoso

El guapísimo multimillonario Leandro Demetrios saca a la nada sofisticada Millie de su granja y la lleva a un mundo de glamour. De su brazo y cubierta de diamantes, Millie pensaba que nada podría afectarlos.

Pero iba a tener que enfrentarse con las más oscura y terrible de las traiciones: su hermana decía estar esperando un hijo de Leandro. De modo que Millie escapa, desolada. Los vestidos de diseño nunca habían podido esconder lo poco elegante y cosmopolita que era.

Ahora, sin embargo, el imponente Leandro exige a su esposa que vuelva a casa... y aunque le avergüence reconocerlo, ella está deseando hacerlo.


Parto diciendo que el libro no resultó ser de mi gusto, aunque la temática es de las que tienden a gustarme, pero no quiero sacar la artillería pesada y atacarlo porque tiene un toque medio lento que resulta agradable.

El inicio nos presenta a un Leandro enamorado de su esposa, pero que no hace nada por remediar su quiebre matrimonial y busca placer en otras mujeres porque su relación no tiene futuro dado que no hay confianza entre los dos. Está claramente herido por su abandono.

No ahondaré en la escena inicial porque es de aquellas que una vez que la lees tienes dos opciones, lo cierras y olvidas el libro o lo sigues porque no puede haber nada peor. Es decir, que la protagonista lo esté esperando y lo sorprenda con su ligue es poco agradable, pero que Leandro derroche machismo y desparrame insultos hacia la chica con la que planea acostarse es otra cosa. A mí por lo menos no me resultó grata la escena y pensé que odiaría al protagonista. Pero cabe destacar que la joven no tiene la suficiente agudeza mental como para saber que la están insultando.

Millie, la esposa, cuya autoestima es tan pequeña como la modestia del marido, se siente fatal y es lógico. Un año antes el matrimonio sufrió un quiebre porque ella encontró a Leandro con su hermana, Becca, desnuda en la piscina. Luego ella se entera que Becca está embarazada y Leandro es el supuesto padre.

Naturalmente ella lo encara y él lo niega, pero Millie se va de todos modos con el corazón roto sin darle el beneficio de la duda. Se entiende que la traición de la que cree ser objeto es muy dolorosa.

Aun así la actitud de los dos deja mucho que desear en este punto y resultan cansinos con los argumentos tontos que se dan, ambos siguen adelante con sus vidas y se rinden antes de dar la batalla por su matrimonio. Es un no parar de recriminaciones y existían problemas graves de comunicación desde antes que la escena de la piscina.

La novela explora el crecimiento y la maduración de este matrimonio roto y Leandro apuesta por formar una familia con la esposa a la que ama y con el hijo de Becca. Pero Millie solo quiere recurar a su sobrino. Me ha resultado un tanto inconsecuente que ella quiera quitarle el niño si piensa que es Leandro el padre. No sé si eso es incluso legal, dado que Leandro lo tiene reconocido, esa duda me quedó.

La inseguridad de Becca y la tozudez de Leandro complican las cosas en más de una ocasión, volviendo la lectura repetitiva y lenta. Ya al final de la novela los papeles se invierten y Millie demuestra su verdadero carácter y se ve más segura de sí. En cambio Leandro muestra su lado más humano y sensible.

Un detalle no menor es que el libro no cierra totalmente y quedan unos cuantos detalles no aclarados sobre Becca y el verdadero padre del niño.

Es un harlequin más y resulta agradable para una tarde, pero predecible donde dos personas que se aman toman caminos supuestamente distintos y avanzan, mas en realidad solo dieron vuelta la cara no verse y no han logrado superarse.

¿Por qué el hecho de que el protagonista sea griego, siempre tiene que ser la cuasi excusa para el machismo?.... Ya sé que machismo hay en todo lado; pero ya es un tópico en las novelas cuando se trata de griegos, ¿No crees?

Yo, por otro lado, cuando pienso en hombre griego, pienso en Kostas Dunas de "La Hermandad del Pantalón viajero". Era griego; pero no era un macho pecho peludo en lo absoluto y tuvo la mejor historia de amor entre él y Lena en la primera película y su secuela. :3